“Yo he venido para que tengan vida, y la tengan en abundancia”. – Juan 10:10
Queridos hermanos y hermanas en Cristo:
En la reunión de los obispos de los Estados Unidos acaecida en noviembre pasado, se invitó a las diócesis y a las parroquias a dedicar un año de servicio a las mujeres embarazadas empezando en marzo. La iniciativa, llamada “Caminando con las mamás necesitadas: un año de servicio”, está destinada a ayudar a las madres en nuestras comunidades locales que enfrentan embarazos con desafíos.
Invito a todas las parroquias y comunidades católicas del área de nuestra diócesis a participar en este esfuerzo tan valioso. No hay necesidad de esperar hasta marzo. El mes de enero, durante el cual dedicamos una jornada de oración el día 22 para la protección legal de los niños no nacidos, es un buen momento para comenzar.
Cuando se presentó la iniciativa, el arzobispo Joseph Naumann de Kansas City, quien preside el Comité de Actividades Pro-Vida, señaló que muchas mujeres enfrentan embarazos difíciles o imprevistos, incluyendo la falta de recursos financieros y de redes de apoyo que defiendan la vida. Estas mujeres se encuentran en las de las periferias, a las cuales el Papa Francisco nos llama a servir de manera más determinada.
La Iglesia, incluidas nuestras parroquias, deben ser lugares donde las mujeres puedan acudir para recibir apoyo. En muchos casos, nuestras parroquias ya ayudan a las mujeres con embarazos no planificados mediante el apoyo a centros de embarazo Pro-Vida, juntando provisiones para las nuevas madres y contribuyendo en otros esfuerzos caritativos. Nuestra agencia diocesana de Caridades Católicas también ayuda a mujeres embarazadas en situaciones de crisis.
Pero puede haber algunos vacíos. ¿Su parroquia/CCA ha recopilado ya una lista completa de recursos de asistencia para el embarazo en el área? ¿Cómo se impulsan esos recursos tanto dentro como fuera de la comunidad parroquial? ¿De qué otras maneras puede su parroquia/ACC asistir a las mujeres embarazadas que lo necesitan?
Esta evaluación puede ser una buena oportunidad para que los grupos de interés social y Pro-Vida parroquiales/CCA trabajen juntos. La protección de la vida humana y la dignidad humana es un sello distintivo de la enseñanza social católica. Espero que estos grupos continúen trabajando juntos en otros temas que amenazan la vida y la dignidad, como son la pobreza, la inmigración y el racismo. Al enfrentar todos estos inconvenientes, debemos nosotros ser el corazón misericordioso de Jesús, la voz de la esperanza y las manos de la justicia en un mundo que con demasiada frecuencia desprecia a los no nacidos, los pobres y los desamparados.
El lanzamiento oficial de la iniciativa “ Caminando con las mamás necesitadas “ en marzo marcará el 25 aniversario del documento “Evangelium Vitae”, la encíclica de San Juan Pablo II sobre el “evangelio de la vida”, en la que nos desafía a tomar todos los pasos necesarios para implementar a una “cultura de la vida”. Esta iniciativa, combinada con nuestros continuos esfuerzos Pro-Vida, es otro paso más en la dirección correcta y atinada.
Sinceramente suyo en Cristo,
+ Donald J. Kettler
OBISPO DONALD J. KETTLER es el noveno obispo de la Diócesis de St. Cloud, Minnesota
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Oh, Madre Santa, recibiste la buena nueva de la encarnación de Cristo, tu Hijo, con fe y confianza. Concede tu protección a todas las embarazadas que enfrentan dificultades.
Guíanos en nuestro esfuerzo por hacer de nuestras comunidades parroquiales lugares de acogida y asistencia para las madres necesitadas. Ayúdanos a convertirnos en instrumentos del amor y la compasión de Dios bondadoso.
María, Madre de la Iglesia, ayúdanos a crear la cultura de la vida y la civilización de amor, junto con todas las personas de buena voluntad, para alabanza y gloria de Dios Creador, y amante de la vida. Amén.
— Comité para Actividades Pro-Vida, Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos