J.R.R. Tolkien, autor de los libros del “El Señor de los Anillos” ye devoto católico, dijo una vez: “Les presento la única gran cosa que debemos de amar en la tierra: El Santísimo. … en él encontrarás romance, gloria, honor, fidelidad, y el verdadero camino de todos tus amores aquí en la tierra”.
La iglesia enseña que, en la Eucaristía, el cuerpo, la sangre, el alma y la divinidad de Jesús están plena y verdaderamente presentes bajo la apariencia de pan y vino. Los católicos reciben la Eucaristía en la Misa y pueden adorar a Jesús en la Eucaristía durante la adoración del Santísimo.
Las enseñanzas de la Iglesia sobre la Eucaristía son creencias fundamentales del catolicismo. A la Eucaristía se le llama a menudo la “fuente y cumbre” de nuestra fe.
Sin embargo, un estudio del año 2019 realizado por el Pew Research Center encontró que solo el 31% de los católicos encuestados creen que la Eucaristía es realmente el cuerpo de Jesús. El sesenta y nueve por ciento de los encuestados dijeron que creían que la Eucaristía es solo un símbolo de la presencia de Jesús.
La encuesta rasgó la fibra sensible de la Iglesia y, poco después, provocó la planificación de un reavivamiento eucarístico nacional, una iniciativa de tres años de la Conferencia de Obispos Católicos de los EE. UU. que finalizará en 2024, para renovar y revitalizar nuestra fe y devoción en la Eucaristía.
“Este reavivamiento es para despertar en los corazones de las personas a Jesús presente en la Eucaristía”, dijo el padre Derek Wiechmann, párroco de la Comunidad Católica de Área de los Cuatro Pilares de la Fe, que incluye las parroquias de St. Louis en Foreston, St. Mary en Milaca,St. Kathryn en Ogilvie y St. Mary en Mora.
El padre Derek tiene una profunda devoción a la Eucaristía. De hecho, fue en la adoración eucarística donde sintió la llamada al sacerdocio, dijo.
Se desempeña como copresidente del equipo de reavivamiento eucarístico local de la Diócesis de St. Cloud junto con la presidenta Kristi Anderson, editora asociada de la revista The Central Minnesota Catholic. El encargo del padre Derek es ofrecer apoyo a nivel diocesano para el reavivamiento desde la perspectiva de un sacerdote.
EL REAVIVAMIENTO EUCARÍSTICO NACIONAL: ¿QUÉ ES?
El Reavivamiento Eucarístico Nacional es un “programa que tiene como objetivo afirmar y comenzar un fuego de devoción a la Eucaristía con un enfoque particular a nivel local: diócesis, parroquias y familias”, dijo el obispo Andrew Cozzens, obispo auxiliar de St. Paul y Minneapolis, en una entrevista con la Catholic News Agency en junio pasado.
El reavivamiento, que no debe confundirse con el Sínodo de toda la Iglesia que está en curso, incluye varias etapas en tres niveles: diocesano, parroquial y nacional. A nivel nacional, comienza oficialmente en la Fiesta de Corpus Christi, el 19 de junio de 2022.
Se anima a todas las diócesis a propagar la devoción eucarística a través de procesiones y otros eventos. En julio de 2023, comenzarán los esfuerzos a nivel parroquial, y se animará a las parroquias a fomentar los mismos esfuerzos en la catequesis eucarística y en las devociones.
El reavivamiento concluirá en julio de 2024 con un Congreso Eucarístico en Indianápolis. En el Congreso, los misioneros eucarísticos serán comisionados y enviados a evangelizar.
En la pasada reunión de la USCCB en noviembre, los obispos aprobaron un documento titulado “El misterio de la Eucaristía en la vida de la Iglesia”.
“Este documento está realmente destinado a ser la fuerza impulsora detrás del reavivamiento, especialmente para reiterar lo que ya sabemos que es verdad, que Jesús está presente en la Eucaristía”, dijo el padre Derek.
El documento de 31 páginas sirve como ayuda para profundizar nuestra devoción y comprensión de la Eucaristía.
Sus dos partes — “El Regalo” y “Nuestra Respuesta” — discuten varios aspectos que encierran la naturaleza de la Eucaristía. Una sección del documento destaca la devoción de diferentes santos a la Eucaristía; otro habla de la necesidad de recibir la Sagrada Comunión en estado de gracia; y otro explica la doctrina de la transubstanciación, que es cuando el pan y el vino se transforman en sustancia en el cuerpo y la sangre de Cristo mediante las palabras de la consagración.
“El Señor nos acompaña de muchas maneras, pero ninguna es tan profunda como cuando lo encontramos en la Eucaristía”, dice el documento.
Es precisamente ese mismo encuentro con la Eucaristía lo que fortaleció la vocación del padre Derek al sacerdocio y le inculcó el deseo de que otros se “transformaran” por ella.
UN ENCUENTRO PERSONAL CON LA EUCARISTÍA
El padre Derek creció en una granja lechera cerca de St. Rosa, siendo el quinto de seis hijos. Después de graduarse de Melrose High School, ingresó al Seminario Immaculate Heart of Mary en Winona. Desde allí asistió al Seminario St. Paul en St. Paul MN y fue ordenado sacerdote en 2017.
El padre Derek dijo que su familia era muy devota. La misa dominical era siempre prioritaria, y en su familia solían rezar todos juntos el rosario por la noche.
“Todo eso realmente me comunicó la fe”, dijo.
La posibilidad del sacerdocio para él comenzó a tomar forma cuando estaba en la escuela secundaria. Comenzó a hacer “esas preguntas básicas de, ‘eh, ¿podría ser yo sacerdote?’”
El padre Derek dijo que hubo un momento particular en la adoración eucarística en la escuela secundaria que recuerda vivamente.
“Recuerdo claramente que una vez me sentí realmente cautivado por nuestro Señor, sabiendo de esta manera interior que este es Jesús presente aquí en la Eucaristía y que quiere ser mi amigo. Y luego, a partir de ahí, simplemente todo comenzó”, dijo.
Finalmente, el padre Derek ingresó al seminario, impulsado por su devoción al Santísimo Sacramento. Su amor por la Eucaristía continuó desarrollándose a lo largo de sus años de seminario en el IHM.
“Un día específico llegué tarde a la capilla. Ya habían empezado con las oraciones de la exposición. Recuerdo que caí de rodillas y me sentí abrumado por una sensación de paz. Era solo parte de ese murmullo silencioso de Cristo invitándome a seguirlo”, dijo.
Como sacerdote, el padre Derek dijo que la Eucaristía es una parte importante de quien es él.
“Cada día, por medio de manos muy indignas, Jesús se hace presente. Trabaja a través de mí. … En cierto sentido tengo una pequeña parte de él haciéndose presente en el mundo. A un nivel muy personal, me llena de humildad el saber que nuestro Señor me eligiera para ser su representante”, dijo.
La Eucaristía también ha adquirido un nuevo significado para él ahora.
“Como sacerdote, me he vuelto más respetuoso de la Eucaristía simplemente sabiendo cuán absolutamente vulnerable se vuelve nuestro Señor cuando viene a nosotros en forma de pan y vino. Es como si yo fuera el protector de la Eucaristía aquí en mis parroquias. Es mi deber fomentar que la Eucaristía reciba la máxima reverencia”, dijo.
Las parroquias de su ACC reflejan este espíritu con relación a la devoción eucarística. Hay una capilla de adoración perpetua en Foreston. El horario de adoración es una de las primeras cosas que se ven en el sitio web de su ACC. El padre Derek incluso encabezó una procesión eucarística en la fiesta del Corpus Christi en junio pasado que se movió por las calles de Milaca.
Los frutos de la adoración hablan por sí mismos, dijo.
“Foreston ya tiene dos seminaristas y tiene adoración eucarística las 24 horas del día. ¡Es como decir, sí, por supuesto!” dijo el padre Derek.
Son esos mismos frutos los que él espera que surjan del reavivamiento.
“Es realmente mi esperanza de que más personas lleguen a creer en la Verdadera Presencia de Jesús en el Santísimo Sacramento porque así nuestro mundo realmente se transformará”, dijo. “Se oye que incluso cuando las capillas de adoración se establecen en ciertas comunidades, el índice de criminalidad se desploma. Hay muchas cosas interesantes como esa”.
ENTENDIENDO LA EUCARISTÍA
El padre Derek dijo que “estemos atentos” con respecto a lo que vendrá para las etapas locales del reavivamiento eucarístico.
También hay varios recursos disponibles para aprender más sobre la Eucaristía y el avivamiento, incluso en el sitio web de la USCCB, www.usccb.org. El padre Derek ofreció un consejo para aquellos que nunca han estado en la adoración eucarística o que quieren crecer en su devoción a la Eucaristía.
Dijo que lo principal es estar siempre abierto y no tratar de poner límites a Dios.
“Para alguien que nunca ha experimentado [la adoración], le aconsejo que esté abierto a lo que Él tiene reservado para usted”, dijo el padre Derek. “No debe suponer que Él va a hablar de esta manera o que usted va a tener este sentimiento después de salir, o va a escuchar una voz resonante, más bien venga verdaderamente con el corazón abierto”.
El padre Derek enfatizó la importancia de tomarse un tiempo para estar en silencio y así escuchar mejor la voz de Dios.
“Hasta que no nos sentemos y oigamos atentamente, puede ser difícil escuchar algo. Por eso se necesita mucha disciplina para orar”, dijo.
También dijo que puede ser posible escuchar las historias personales de otros sobre encuentros con la Eucaristía y sentir que algo anda mal si nunca ha usted experimentado algo así.
“Este es quizás uno de los peligros: escuchar los testimonios de las personas y luego pensar para nosotros mismos, ‘Caramba, yo nunca he experimentado eso. ¿Qué me pasa?’ Pero sepa que nuestro Señor le hablará a cada persona de una manera única y particular, así que venga con el corazón abierto”.
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Historia de Gianna Bonella