En entrevista, el Papa Francisco dice que las críticas son molestas, pero pueden ser útiles

Por Cindy Wooden | Catholic News Service

Las críticas públicas de cardenales y obispos son molestas, “Son como la urticaria, que molesta un poquito”, dijo el Papa Francisco, pero las diferencias deben ventilarse y las críticas pueden ser útiles, dijo a Associated Press.

“Uno prefiere que no las haya. Para tranquilidad”, dijo en la entrevista realizada el 24 de enero y publicada al día siguiente. “Pero prefiero que lo hagan porque eso quiere decir que hay libertad para hablar”.

El papado no es una dictadura, dijo, y, además, “la crítica ayuda a crecer y a que vayan bien las cosas”.

La entrevista de AP con el papa también cubrió temas que van desde su salud hasta la crisis de abuso sexual por parte del clero y desde la homosexualidad hasta posibles políticas para regular la jubilación de un papa que renuncie a su cargo.

El Papa Francisco dijo que no participó en el levantamiento de la excomunión en 2020 del padre jesuita Marko Rupnik, un sacerdote y artista esloveno, quien continúa teniendo restricciones en su ministerio luego de acusaciones adicionales de abuso sexual, psicológico y espiritual de mujeres en una orden religiosa a la que ayudó comenzar.

Y si bien dijo que siempre ordena el levantamiento de la prescripción cuando un caso involucra a alguien que era un niño en el momento del abuso, no lo hace cuando los sobrevivientes eran adultos porque la justicia exige respeto por la idea de que una persona es inocente hasta que se prueba la culpabilidad y que los delitos deben ser juzgados dentro de un plazo determinado.

El papa Francisco, habla en su audiencia general semanal el 23 de noviembre de 2022.(Foto CNS/Vatican Media)

En la discusión sobre la homosexualidad, el Papa Francisco dijo que “ser homosexual no es un delito. No es un delito”. Y definió como “injustas” las leyes que criminalizan la homosexualidad o la actividad homosexual.

Según la enseñanza de la Iglesia, la actividad homosexual es pecaminosa, dijo el papa, pero, como enseña el Catecismo de la Iglesia Católica, las personas homosexuales deben ser respetadas y bienvenidas y no marginadas ni discriminadas.

“Somos todos hijos de Dios y Dios nos quiere como estamos y con la fuerza que luchamos cada uno por nuestra dignidad”, dijo el papa.

Ser gay “no es un delito”, dijo. Uno podría decir, “‘Sí, pero es pecado.’ Bueno, primero distingamos pecado por delito”.

“También es pecado la falta de caridad con el prójimo”, añadió.

En los días posteriores a la muerte del Papa Benedicto XVI, el arzobispo Georg Gänswein, secretario del difunto papa, publicó un libro que incluía críticas al Papa Francisco, incluso por la forma en que trató al arzobispo Gänswein, pero también por su decisión de limitar las celebraciones de la Misa usando la liturgia pre-Vaticano II.

Luego, poco después de la muerte del cardenal australiano George Pell el 10 de enero, salieron a la luz dos textos que se le atribuyen y que critican al papa, uno llamando a su papado una “catástrofe”.

“Aunque dicen que al final me criticó. Bueno, tiene derecho”, dijo el Papa Francisco cuando se le preguntó sobre el cardenal Pell. “La crítica es un derecho humano”.

Al mismo tiempo, dijo, el cardenal era “un gran tipo. Grande”, e hizo mucho para iniciar el proceso de reforma de las finanzas del Vaticano.

El Papa Francisco se opuso a la idea de que las críticas han aumentado desde la muerte del Papa Benedicto y que de alguna manera están relacionadas con que el difunto papa ya no está presente para calmar a los críticos.

En cambio, dijo, parece ser una parte natural del “desgaste” de su papado, que se acerca a su décimo aniversario. En los primeros años, dijo, todo era nuevo y emocionante, pero las críticas empezaron “cuando empezaron a ver mis defectos y no les gustaron”.

Como lo había hecho poco antes de la muerte del Papa Benedicto, el Papa Francisco también le dijo a AP que no tenía planes de emitir normas sobre cómo debería vivir y vestirse un papa jubilado y cómo debería llamarse.

Pero, dijo, si alguna vez renunciara, insistiría en ser llamado obispo emérito de Roma y viviría en una residencia diocesana de Roma para sacerdotes jubilados.

El Papa Francisco insistió está “bien de salud”, al menos lo que es “normal” para su edad, que es de 86 años. Su rodilla se ha curado, dijo, pero le dijo a AP que nuevamente sufre de diverticulosis o protuberancias en la pared intestinal, condición por la que fue intervenido quirúrgicamente en 2021.

El día después de la publicación de una carta de altos funcionarios del Vaticano criticando el plan del “Camino Sinodal” católico alemán para establecer un “Consejo Sinodal” de obispos y laicos para tratar los problemas nacionales que enfrenta la iglesia, AP le preguntó al papa sobre su opinión del proceso sinodal de Alemania, que comenzó en 2019. El proceso se ha centrado en cuatro áreas que un importante estudio identificó como que contienen las “causas sistémicas” del abuso sexual y su encubrimiento: el ejercicio del poder en la Iglesia; moralidad sexual; existencia sacerdotal; y el papel de la mujer en la Iglesia.

Pero el Papa Francisco le dijo a AP que el proceso alemán parecía ser “elitista” porque involucraba principalmente a obispos, teólogos y laicos invitados a participar por la conferencia de obispos y el Comité Central de Católicos Alemanes del país. Y, dijo, podría volverse “ideológico”, lo cual es peligroso porque “cuando la ideología se mete en los procesos eclesiales, el Espíritu Santo se va a su casa”.

  Share:

Author: Catholic News Service

Catholic News Service is the U.S. Conference of Catholic Bishops’ news and information service.

Leave a Reply

*