Franciscanas y el fondo para apoyar al planeta, tiene como objetivo aumentar el respeto por la tierra y entre nosotros como humanos
Cada año, las canchas de tenis de la preparatoria, Royalton High School, se inundan con agua que corre por el pavimento y erosiona la ladera de la colina.
Cuando el profesor de agricultura Robert Skwira se enteró de una nueva oportunidad de subvención que ofrecían las Hermanas Franciscanas de Little Falls a través de la iniciativa que llamaron, “Fondo para apoyar al planeta”, se le ocurrió una idea para recolectar el agua de lluvia y crear un sistema de drenaje.
Como director de Royalton del Y.E.S. Club — Youth Energy Summit — Skwira es responsible de liderar un grupo de 60 estudiantes dedicados a ayudar a mejorar la escuela y la comunidad.
El maestro Kwira, present la idea de solicitar la beca para desarrollar un proyecto con los estudiantes y juntos trabajar en esta iniciativa.
Su plan es cavar una zanja con un estanque en el fondo para recolectar el agua, que usarán para regar los árboles frutales y otra vegetación en los terrenos de la escuela y evitar una mayor erosión.
“Mi objetivo es que los estudiantes vean lo importante que es ser un buen administrador de la tierra que Dios nos ha confiado mientras reconstruimos la escorrentía de agua alrededor de las canchas de tenis”, dijo Skwira.
En el espíritu de la encíclica “Laudato Si” del Papa Francisco de 2015, Fondo para apoyar al Planeta, es una idea inspirada de las Hermanas Franciscanas de Little Falls para abordar las crecientes preocupaciones de la emergencia climática. Esta iniciativa, que aceptó su primera ronda de solicitudes el otoño pasado, apoya proyectos que promuevan el respeto por la tierra y concienticen sobre la necesidad urgente de proteger el medio ambiente.
“Como miembro del estilo de vida franciscano, me siento conectada con la tierra”, dijo la hermana franciscana Carolyn Law, una de las ministras asistentes de la comunidad y miembro del comité Un Planeta.
“Muchas de nosotras, hermanas, somos de áreas rurales y hemos crecido cerca de la naturaleza y la tierra, sus criaturas y su gente, todos los cuales son muy cercanos y queridos para nosotras”, dijo. “Tenemos una gran preocupación por el rumbo del mundo. Estamos en una emergencia, y queremos hacer cosas grandes y pequeñas para seguir cuidando la tierra y todos los que están en ella. El Papa Francisco dice que nos estamos quedando sin tiempo, por lo que decidimos actuar ahora”.
Las hermanas reservaron fondos para establecer Fondo para el Planeta. La primera ronda se adjudicó en Noviembre pasado y la segunda ronda en Febrero.
Además de Royalton High School, el comité Fondo para apoyar el Planeta otorgó subvenciones para otros siete proyectos locales:
- Escuela Católica St. Francis en Brainerd para un invernadero;
- Sociedad Agrícola del Condado de Morrison para un programa anual para involucrar a los jóvenes locales en el aprendizaje y el cuidado de las plantas;
- Toxic Taters Coalition, en una ciudad en Otter County, para educar sobre pesticidas y proporcionar pruebas de agua y filtros para personas con niveles elevados de nitratos en el agua;
- Preservation Alliance of Minnesota para clases de jardinería;
- Iglesia Christ Our Light en Princeton/Zimmerman para un jardín de polinizadores;
- Proyecto de Sostenibilidad de Minnesota Central para trabajar con las escuelas de St. Cloud para ofrecer la oportunidad de cultivar plántulas de hortalizas en las aulas para utilizarlas en el Jardín Comunitario de Maine Prairie;
- La cooperativa Centra Sota organizará un día de campo de la salud del suelo para educar a los productores sobre las prácticas que se pueden implementar en sus tierras.
Cuando Molly Weyrens, asociada pastoral de Christ Our Light, escuchó por primera vez sobre la subvención One Planet/Fondo para apoyar al Planeta, animó al recién formado Equipo de Cuidado de la Creación de la parroquia a presentar su solicitud.
“Estamos muy agradecidos por la gran visión de las hermanas franciscanas de querer sostener nuestro planeta”, dijo Molly. “También estoy contenta y agradecida por un equipo de personas aquí en Christ Our Light que comparten el deseo de tomar medidas para mantener saludable a la Madre Tierra. A través de este proyecto esperamos realzar la belleza del cementerio, proporcionar una vegetación saludable y también educar a nuestra comunidad sobre formas alternativas de cuidar y crear sus jardines”.
Patti Kukowski, miembro del Equipo de Cuidado de la Creación, ayudó a escribir la propuesta para el jardín de polinizadores en el cementerio para atraer abejas y mariposas, al tiempo que ofrece una oportunidad para que los feligreses se involucren en este proyecto. “Esperamos unir a la comunidad de nuestra iglesia haciendo este Proyecto y disfrutando del Proyecto terminado. Pensamos que esta subvención podría ayudarnos a hacer plantaciones para ayudar a la naturaleza y proporcionar un lugar agradable y tranquilo para que la gente disfrute”.
Rick Walter tiene la misma esperanza para la subvención que ayudó a escribir para el Proyecto de Sostenibilidad de Minnesota Central, una organización que ayuda a conectar a las personas con pequeñas parcelas de tierra para cultivar sus propios alimentos en jardines comunitarios. El Proyecto es doble. Comienza dando a los estudiantes de las escuelas del área de St. Cloud la oportunidad de cultivar plántulas que luego se utilizarán en los jardines. Y ofrece un lugar para que las familias, especialmente las nuevas en el área cuiden un terreno.
“No solo estamos cultivando alimentos, estamos haciendo crecer una comunidad”, explicó Rick.
“Tenemos 83 lotes cultivados en su mayoría por familias que son nuevas en este país.
Me hace increíblemente feliz ofrecer esta oportunidad. Las amistades que se hacen aquí son increíbles. En el jardín, no importa de qué país seas o qué historia traigas. Aquí en el jardín, es un campo de juego parejo. La gente se saluda, se abraza. Es como un tiempo donde viejos y nuevos conocidos se reúnen para celebrar y cuidarse unos a otros. Espero con ansias la próxima temporada de crecimiento de vegetales”.
En nombre de la comunidad franciscana, la Hermana Carolyn invita a escuelas, parroquias y otras organizaciones o grupos a pensar creativamente sobre las necesidades y posibilidades de sus propios vecindarios.
“Estamos encantadas con los proyectos que hemos conocido hasta ahora, y alentamos a todos a trabajar a través de las culturas y generaciones para crear nuevas ideas para apoyarnos y cuidarnos unos a otros y a la tierra”, dijo.
Las subvenciones de One Planet Fund, Fondo para apoyar al Planeta, son de hasta $1,000 dólares y se otorgan tres veces al año. Las solicitudes deben presentarse el 1 de Noviembre, el 1 de Febrero y el 1 de Julio. Se alienta a todos los grupos religiosos, especialmente los grupos de jóvenes, a desarrollar proyectos creativos que promuevan la mitigación del cambio climático y una vida sostenible. También pueden postularse otras organizaciones de servicios y grupos comunitarios. Para obtener más información y descargar la aplicación, visite www.fslf.org.