En la escuela secundaria, como muchos compañeros de estudios, Blake Zavala estaba ocupado. Tan ocupado que cuando llegó el momento de prepararse para el sacramento de la confirmación, dejó pasar la oportunidad.
Ahora en el último año de la Universidad de St. John en Collegeville, Blake recuerda haber llegado a la universidad con su fe en un segundo plano. No es que la fe no fuera importante.
“Simplemente no lo convertí en una prioridad”, dijo.
Este año convirtió la Confirmación en una prioridad y es uno de los cuatro estudiantes que serán recibidos en plena comunión con la Iglesia en la misa para estudiantes de las 9 p.m., Abril 16 en la iglesia St. John’s Abbey en Collegeville.
Blake y otros dos estudiantes, Richard Guerue, ’23, y Natalie Welinski, ’25, son candidatos que se preparan para ser confirmados. Hiatt Boileau, ’23, es catecúmeno y será bautizado, recibirá la primera Comunión y será Confirmado.
Blake, un estudiante de biología que se graduó esta primavera, fue bautizado cuando era un bebé y tuvo su primera comunión. Ha sido un miembro activo de la Misa comunitaria de las 9 p.m. durante sus cuatro años en St. John’s. Pero no había dado ese último paso de iniciación plena en la Iglesia.
“Pensé: ‘Bueno, realmente no creo que lo necesite. Sé que soy quien soy. Tengo mi fe en Dios’. Y pensé que solo eso sería suficiente para mí”, dijo.
Sus amigos lo instaron a dar un salto de fe. Le hablaron sobre el Rito de Iniciación Cristiana de Adultos, (RICA) a través del ministerio del campus de SJU, y le recordaron cómo asistir a la Misa con regularidad lo ayudó en los momentos difíciles de su vida.
Según el padre benedictino Nick Kleespie, capellán de SJU, para algunos estudiantes de secundaria, otras actividades o circunstancias familiares, como mudarse a una nueva comunidad, se interponen en el camino para que reciban formación en la fe y preparación sacramental con regularidad.
“Estudiantes como Blake se encuentran en la universidad queriendo hacer las grandes preguntas sobre su fe”, dijo. “También buscan un mayor deseo de participar en la vida de la Iglesia, particularmente en la vida sacramental de la Iglesia”.
Blake recuerda haber estado “en desacuerdo con Dios”, a veces cuando era adolescente. Uno de los momentos más oscuros, dijo, fue cuando a su madre le diagnosticaron cáncer en 2015. Se detectó temprano, lo que su familia ve como una señal de Dios, dijo. Pero todavía se preguntaba por qué Dios permitiría que esto le sucediera a ella.
“A veces te enfrentas a Dios”, dijo. “Pero luego, después de mucha introspección, mucho mirar hacia atrás, e incluso durante esos momentos también, me di cuenta … él realmente me ayudó en mi vida y también a mi familia. Siempre ha estado presente.
“Mirando hacia atrás, me alegro de que mis amigos hayan plantado la semilla en mi mente”, agregó.
No hubo presión, dijo. “Por mucho que ellos hayan pensado que sería bueno que yo fuera Confirmado, en última instancia la decisión fue mia”.
“Creo que Blake ha necesitado mucho coraje para decir ‘sí’ al proceso de formación y confirmación”, dijo el padre Kleespie. “Con tantas cosas compitiendo por el tiempo en la vida de los jóvenes como Blake, decidió unirse a un grupo de otros jóvenes y aprender más sobre su fe y el amor de Dios por ellos”.
Lisa Nutkowicz, la madre de Blake, ve un declive general entre las personas en la práctica espiritual y la participación en la fe, dijo, y está contenta de que “Blake haya elegido alejarse de esta tendencia y comenzar su viaje cristiano profesando su compromiso con su fe.
“Ha estado fuera de la secuencia tradicional por un tiempo y estoy muy contenta de que mi hijo, haya tomado la decisión de completar uno de los sacramentos más significativos, un compromiso con nuestra fe católica que invoca la fuerza espiritual y la gracia del Espíritu Santo”, Nutkowicz ha dicho. “Estoy más que orgullosa, muy feliz y emocionada de que Blake se embarque en este viaje espiritual”.
Sus padres, que son miembros de la Misión St. Dominic en Rio Verde, Arizona, no podrán asistir a la Misa pero verán la transmisión en vivo. Nutkowicz dijo que ha hecho un paquete de regalos especiales para que su hijo abra en ese día tan especial.
Blake dijo que ve este compromiso como un fortalecimiento de su relación con Dios.
“Nunca sentí que algo se moviera en mi alma que me hiciera darme cuenta de que Dios está ahí”, dijo Blake. “Pero es a través de las cosas que he visto y las cosas que he experimentado que suceden completamente fuera de mi control. Las cosas están en su punto más oscuro, y realmente crees que esto es todo, está la situación fuera de la sartén, en plena flama. Es en ese pequeño momento que Dios simplemente cambia el rumbo, y luego, de alguna manera, no aterrizas en la flama, aterrizas justo en la sarten. Son esos pequeños momentos en los que miro hacia atrás y sé que Dios estuvo trabajando allí todo el tiempo”.
También sabía que quería poder participar plenamente en los sacramentos, especialmente si algún día se casaba, dijo.
“Rodeados de sus compañeros de clase y amigos, estos jóvenes dan testimonio de la llegada del Espíritu Santo a nuestra comunidad de maneras nuevas y creativas”, dijo el Padre Kleespie. “Los cuatro, Hiatt, Natalie, Richard y Blake, dan testimonio a toda nuestra comunidad de lo que significa profundizar nuestra relación con la Iglesia, servir al pueblo de Dios y buscar a Dios con un corazón abierto y amoroso.”