La ‘complicada’ y ‘alegre’ fase norteamericana del Sínodo concluye con una llamada a la misión y se traslada a Roma

Por Gina Christian

(OSV News) — El documento final de la fase norteamericana del Sínodo sobre la Sinodalidad 2021-2024 fue publicado el 12 de abril, capturando un proceso de diálogo y discernimiento que dos participantes describieron como “complicado”, “alegre” y unificador — como el sínodo mismo.

“Es asombroso lo que sucede cuando … se invoca al Espíritu Santo en la conversación”, dijo a OSV News Julia McStravog, teóloga y coordinadora del equipo norteamericano para la fase continental del sínodo.

“El enfoque sinodal provocó un genuino aprecio y alegría por parte del pueblo de Dios al poder entablar una conversación, incluso si se trataba de temas difíciles”, dijo a OSV News el coordinador del equipo, Richard Coll. Coll es también director ejecutivo del Departamento de Justicia, Paz y Desarrollo Humano de la Conferencia de los Obispos Católicos de Estados Unidos.

Dirigidos por obispos católicos de Canadá y Estados Unidos, McStravog, Coll y sus compañeros de equipo han sintetizado los resultados de las sesiones de escucha del Sínodo en los dos países, elaborando un documento final de 36 páginas que puede descargarse en usccb.org/synod. (Según la USCCB, la Iglesia católica de México participa en el sínodo mundial con el Consejo Episcopal Latinoamericano, o CELAM, dada su larga colaboración con esa conferencia).

El equipo sinodal norteamericano — compuesto por ocho obispos, tres laicas, dos sacerdotes, dos laicos y dos religiosas — dedicó tiempo a la oración, el silencio y la discusión para destilar las respuestas que se incluirán en el texto, que constituye una respuesta al Documento para la Etapa Continental emitido por la Secretaría General (de la Santa Sede) para el Sínodo de los Obispos en octubre de 2022.

El documento final para la etapa continental de Norteamérica, junto con las contribuciones de las otras seis asambleas continentales, constituirá la base del “Instrumentum Laboris”, el documento de trabajo del sínodo mundial, que la Secretaría General publicará en junio.

El arzobispo de Filadelfia Nelson J. Pérez se une a estudiantes universitarios, otros jóvenes adultos y líderes de ministerios durante una sesión de escucha sinodal en la Universidad La Salle el 4 de abril de 2022. (Foto de OSV News/Archivo CNS, Sarah Webb, CatholicPhilly.com)

El obispo Daniel E. Flores de Brownsville, Texas, presidente del Comité de Doctrina de la USCCB, que lidera el equipo norteamericano con el obispo canadiense Raymond Poisson de Saint-Jérôme-Mont-Laurier, Quebec, presentó el documento en el Vaticano el 12 de abril.

Lanzado por el Papa Francisco en octubre de 2021, el sínodo plurianual de obispos — cuyo tema es “comunión, participación y misión” — busca cultivar una dinámica continua de discernimiento, escucha, humildad y compromiso dentro de la Iglesia católica.

El informe norteamericano destaca tres temas clave: las implicaciones del bautismo, la comunión con Cristo y de unos con otros, y el discipulado misionero como vivencia de la misión.

“Nuestra dignidad bautismal es inseparable de nuestra responsabilidad bautismal, lo cual nos envía en misión”, afirmó el documento. “Cada persona humana posee la dignidad que proviene de ser creado a la imagen de Dios. A través del bautismo, los cristianos comparten una dignidad exaltada y la vocación a la santidad, sin desigualdades por razón de la raza, de la nacionalidad, de la condición social o del sexo, porque somos uno en Cristo Jesús”.

En virtud de su bautismo, los participantes en la fase norteamericana del Sínodo expresaron “el deseo de un mayor reconocimiento y oportunidades para la corresponsabilidad dentro de la Iglesia y su misión”, con una mayor colaboración “entre los laicos y el clero, incluidos los obispos”, dijo el documento. También subrayó que “no puede haber una verdadera corresponsabilidad en la Iglesia sin el pleno respeto a la dignidad inherente de la mujer”.

Un “auténtico reconocimiento y respeto por los dones y talentos de los adolescentes y jóvenes es otro aspecto vital de una Iglesia de corresponsabilidad en América del Norte”, aseguró el documento.

En medio de la “una polarización y una fuerte tendencia hacia la fragmentación”, los participantes en el Sínodo de Norteamérica subrayaron la necesidad de “mantener la centralidad de Cristo”, especialmente en la Eucaristía.

El documento reconocía con franqueza que “una amenaza significativa para la comunión dentro de la Iglesia es la falta de confianza, especialmente entre los obispos y los laicos, pero también entre el clero en general y los fieles laicos”.

La crisis del abuso sexual por parte del clero en particular ha provocado “una de las principales áreas de tensión en América del Norte”, al igual que “injusticias históricas encontradas en los internados/escuelas residenciales para personas Indígenas, las cuales incluyeron abuso de todo tipo”, señala el documento.

En su introducción al documento, los obispos Flores y Poisson admitieron la necesidad de “hacer esfuerzos para escuchar de manera más efectiva a aquellos que no hemos escuchado, incluyendo muchos que han sido relegados a los márgenes de nuestras comunidades, de la sociedad y de la Iglesia”. Señalaron que su “ausencia” en el proceso sinodal “no es fácil de interpretar, pero se sintió palpablemente”.

Entre las personas que a menudo faltaban en las sesiones sinodales estaban los sacerdotes, y los obispos reconocieron su responsabilidad de abordar esa carencia tanto con el ejemplo como transmitiendo la transparencia y la fecundidad espiritual/pastoral de la sinodalidad”.

Los participantes en el Sínodo mencionaron como marginados dentro de la Iglesia a las mujeres, los jóvenes, los inmigrantes, las minorías raciales o lingüísticas, las personas LGBTQ+, los divorciados y vueltos a casar civilmente sin una anulación y las personas con diversos grados de discapacidad física o mental.

El acercamiento y la inclusión de estos grupos son impulsados en última instancia a nivel local por los fieles que viven activamente su bautismo, dijo McStravog a OSV News.

Al mismo tiempo, “los obispos se tomaron muy a pecho la llamada… a llegar a la periferia”, dijo Coll a OSV News, quien añadió que las sesiones virtuales del sínodo permitieron una participación más amplia.

Según el documento, los participantes en el Sínodo expresaron constantemente su deseo de una mejor formación en la fe y en la doctrina social católica.

A medida que el proceso sinodal avanza hacia su siguiente fase, Coll y McStravog señalaron la necesidad de humildad y apertura a la voluntad de Dios.

“No tenemos todas las respuestas, y nada de esto está preparado de antemano”, dijo Coll. “Hay que confiar en que el Espíritu estará ahí para guiarnos a pesar del desorden o las complicaciones… o quizá a causa de ellas”.

NOTAS: El Documento Final para la Etapa Continental en América del Norte, disponible en inglés, español y francés, puede verse en usccb.org/synod.

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Author: OSV News

OSV News is a national and international wire service reporting on Catholic issues and issues that affect Catholics.

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