Por Carol Glatz | Catholic News Service
CIUDAD DEL VATICANO (CNS) — La pobreza y la desigualdad, factores importantes en la explotación del trabajo infantil, deben abordarse, dijo el papa Francisco en un mensaje.
“Lamentablemente, demasiadas manos pequeñas están ocupadas arando campos, trabajando en minas, recorriendo grandes distancias para sacar agua y haciendo trabajos que les impiden asistir a la escuela, por no hablar del delito de prostitución infantil, que está robando a millones de niños su alegría de su juventud y su dignidad dada por Dios”, escribió el papa en un mensaje a una conferencia mundial contra el trabajo infantil.
“Puesto que la pobreza es, de hecho, el principal factor que expone a los niños a la explotación laboral, confío en que sus deliberaciones no dejarán de abordar las causas estructurales de la pobreza mundial y la escandalosa desigualdad que sigue existiendo entre los miembros de la familia humana”, dijo el papa a los participantes de la conferencia.
El mensaje del papa Francisco fue dirigido a Guy Ryder, director general de la Organización Internacional del Trabajo, con motivo de la quinta Conferencia Mundial sobre la Erradicación del Trabajo Infantil que se celebra del 15 al 20 de mayo en Durban, Sudáfrica. El arzobispo Peter B. Wells, nuncio apostólico de Sudáfrica, leyó el mensaje del papa a la asamblea el 16 de mayo.
Al enviar sus “saludos cálidos y buenos deseos de oración” a los asistentes a la conferencia, el papa dijo que esperaba que la conferencia creara conciencia y promoviera un compromiso para combatir el problema del trabajo infantil.
“Si bien se han logrado avances significativos en la eliminación del flagelo del trabajo infantil en la sociedad, esta tragedia se ha visto agravada por el impacto de la crisis sanitaria mundial y la propagación de la pobreza extrema en muchas partes de nuestro mundo donde la falta de oportunidades de trabajo decente para adultos y adolescentes, la migración y las emergencias humanitarias condenan a millones de niñas y niños a una vida de empobrecimiento económico y cultural”, escribió.
El papa Francisco escribió que esperaba que la conferencia condujera a un mayor compromiso de los líderes relevantes y de las organizaciones internacionales y nacionales en “trabajar para encontrar formas apropiadas y efectivas de proteger la dignidad y los derechos de los niños, especialmente a través de la promoción de los sistemas de protección social y el acceso a la educación por parte de todos”.
“La forma en que nos relacionamos con los niños, la medida en que respetamos su dignidad humana innata y sus derechos fundamentales, expresa qué tipo de adultos somos y queremos ser y qué tipo de sociedad queremos construir”, escribió.
El Vaticano está comprometido a trabajar de manera que ayude a la comunidad internacional a perseverar en sus esfuerzos para luchar contra la explotación laboral infantil “para que los niños puedan disfrutar de la belleza de esta etapa de la vida, al mismo tiempo que cultivan sueños para un futuro brillante”, dijo escribió el papa.
La Jornada Mundial contra el Trabajo Infantil se conmemorará el 12 de junio y tendrá como lema “Protección Social Universal para Terminar con el Trabajo Infantil”.
Un informe publicado por la Organización Internacional del Trabajo y UNICEF en 2021 estimó que unos 160 millones de niños, casi uno de cada 10, en todo el mundo se vieron atrapados en el trabajo infantil forzado, un aumento de 8.4 millones de niños en los cuatro años anteriores.
El informe dijo que encontró “un aumento significativo en el número de niños de 5 a 11 años en trabajo infantil, que ahora representan poco más de la mitad de la cifra global total”. El número de niños de 5 a 17 años que realizaban trabajos peligrosos para su salud, seguridad o moral “aumentó en 6.5 millones a 79 millones desde 2016”.