Por Catholic News Service
CIUDAD DEL VATICANO (CNS) — El papa Francisco expresó personalmente su agradecimiento a las cuatro docenas de personas que leyeron cientos de informes sobre la fase de escucha del Sínodo de los Obispos y, después de 12 días de oración, reflexión, y discusión, redactaron un documento de trabajo para la etapa continental del proceso sinodal.
El Santo Padre dio la bienvenida a los cardenales, obispos, sacerdotes, religiosos, y laicos participantes al Vaticano el 2 de octubre, el último día de su trabajo.
En el centro del trabajo se encontraban las 112 síntesis presentadas por conferencias episcopales nacionales de todo el mundo, así como síntesis de iglesias católicas orientales, órdenes religiosas, organizaciones y movimientos eclesiásticos, oficinas de la Curia romana e individuales. Cada una de las 25 personas designadas para el comité de redacción leyó una docena de informes antes de unirse a los demás en Frascati, en las afueras de Roma, el 21 de septiembre.
“Venimos a ti al final de una experiencia eclesial única y extraordinaria que nos ha hecho tomar conciencia de la riqueza de los frutos que el Espíritu está suscitando en el pueblo santo de Dios”, el cardenal Mario Grech, secretario general del Sínodo de Obispos, dijo al papa Francisco, según la Oficina del Sínodo.
“Realmente sentimos asombro ante las maravillas que Dios está obrando en su iglesia”, manifestó el cardenal. Y, cuando vuelvan a casa, los miembros del grupo de redacción “podrán decir que la iglesia se ofrece como casa para todos, porque la experiencia de sinodalidad que estamos viviendo nos lleva a ‘ampliar el espacio de la tienda’ para acoger de verdad a todos”.
Ni la Oficina de Prensa del Vaticano ni la Oficina del Sínodo dijeron si el papa hizo algún comentario al grupo.
Antes de escribir el primer borrador, los participantes se reunieron en una sucesión de pequeños grupos ordenados — por ejemplo, por región geográfica o estatus eclesial. Incluso pasaron tiempo en grupos de trabajo de hombres o mujeres, identificando temas clave en los informes nacionales, orando por las voces que parecían faltar, y notando tensiones o sugerencias.
Después de leer, discutir, y corregir el borrador, se les unieron los obispos que son miembros del Consejo Ordinario del Sínodo de los Obispos. El consejo aprobó el documento, que se publicará a fines de octubre, según la secretaría general del sínodo.
El documento será objeto de oración y discusión en las asambleas continentales, que se realizarán entre enero y marzo de 2023.
Según la Oficina del Sínodo, “la intención de la etapa continental es profundizar nuestro discernimiento sobre lo que ha surgido de la etapa anterior de escucha local y nacional, con el objetivo de formular preguntas abiertas con mayor precisión y fundamentar y desarrollar mejor las ideas provenientes de las iglesias locales”.
Aunque se les llama “asambleas continentales”, las reuniones están más alineadas con las conferencias regionales de obispos. Se planean seis asambleas, que incluirán obispos, sacerdotes, religiosos y laicos: Europa; América Latina y el Caribe; África y Madagascar; Asia; Canadá, y Estados Unidos; y el Medio Oriente, incluidas las iglesias católicas orientales.